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Los programas de mantenimiento de detectores de gases reducen el contacto humano

La COVID-19 ha cambiado drásticamente nuestras vidas y nos ha forzado a hacer cambios personales y profesionales. Uno de esos cambios ha sido el distanciamiento físico y la reducción del contacto humano. Muchas compañías han adoptado medidas como reducir la fuerza laboral, escalonar los turnos, rotar al personal e implementar programas de inducción al sitio (listas de verificación al entrar y al salir, controles de temperatura, etc.). Desafortunadamente, algunas compañías tienen dificultades con estas medidas de protección porque los trabajadores con frecuencia necesitan compartir espacios, equipos, herramientas, etc. Los profesionales de ambiente, salud y seguridad (environment, health and safety, EHS) y los líderes de seguridad han enfrentado estos desafíos para encontrar maneras seguras y creativas de adaptar sus lugares de trabajo a esta “nueva normalidad”.

Algo que no se puede permitir cambiar es proporcionar a los trabajadores equipos de detección de gases que salvan vidas. Esto puede ser difícil cuando todo funciona normalmente, por lo que se vuelve aún más difícil mientras atravesamos la COVID-19. Los desafíos de adaptar un programa de detección de gases a la pandemia de COVID-19 son dos: si tiene menos trabajadores en el sitio, quizá no tenga los recursos y la experiencia para mantener su flota de detectores de gases y, cuando los trabajadores usan detectores de gases, generalmente tienen contacto físico con otros trabajadores y espacios compartidos en el sitio.

Es poco frecuente que los trabajadores tengan sus propios detectores de gases personales de uso individual; en cambio, los compañeros que trabajan en diferentes turnos pueden compartir un detector de gases. Esto quiere decir que los trabajadores deben ir a una oficina o lugar de mantenimiento compartido varias veces por día para buscar y devolver sus detectores de gases. Mientras lo hacen, es probable que el trabajador esté en contacto con los técnicos de mantenimiento u otros compañeros mientras cargan manualmente, realizan pruebas funcionales, calibran y cargan registros de datos del monitor. Por otro lado, si tiene menos personal en el sitio, es posible que el trabajador no tenga acceso a un técnico de mantenimiento capacitado que pueda diagnosticar y arreglar un problema en un monitor. Esto no solo causa tiempo de inactividad, también genera el riesgo de que su gente use un monitor que podría no funcionar o, lo que es peor, que intente hacer su trabajo sin un monitor. 

Reducir el contacto humano y mejorar la eficacia del mantenimiento

Afortunadamente, hay dos maneras fáciles de reducir la cantidad de tiempo que sus trabajadores pasan en espacios compartidos para sus necesidades de detección de gases: estaciones de acoplamiento y programas de servicio por suscripción.

Las estaciones de acoplamiento reducen marcadamente la cantidad de tiempo que pasan sus trabajadores en contacto cercano porque simplifican el mantenimiento diario de los detectores de gases, como pruebas funcionales, carga y registro de datos. Con las estaciones de acoplamiento, sus trabajadores colocan su monitor en la estación cuando terminan su turno, y esta comienza automáticamente las tareas básicas de mantenimiento. Al día siguiente, el trabajador simplemente toma el monitor de la estación y comienza a trabajar, sin necesidad de manipular múltiples cilindros de gas y tuberías para la calibración. Un proceso que hubiera llevado unos 10 minutos si se hiciera manualmente ahora lleva unos pocos segundos. Para los monitores compartidos, la estación de acoplamiento es un lugar ideal para implementar procedimientos de limpieza y desinfección.

Si bien las estaciones de acoplamiento son ideales para reducir el contacto humano en las tareas diarias de mantenimiento, los servicios de suscripción para detección de gases llevan la seguridad un paso más lejos porque cubren la resolución de problemas y la reparación. Los programas de suscripción para detección de gases como iNet® Exchange son útiles en condiciones normales de funcionamiento y son especialmente útiles ahora si tiene personal reducido o está limitando la cantidad de visitantes (incluidos los servicios de reparación en el sitio) debido a las restricciones por la COVID-19. Con un servicio completo, en un programa por suscripción como iNet Exchange, una estación de acoplamiento revisa el rendimiento de sus monitores, sensores, placas de circuito, microprocesadores y bombas cada vez que sus trabajadores colocan los monitores en la estación. Le indicaremos si un monitor se debe reemplazar, antes de que falle, y le enviaremos automáticamente uno nuevo. Tendrá una entrega sin contacto de un monitor nuevo sin cargo, en muy poco tiempo. Sus trabajadores pueden pasar menos tiempo aglomerados en una sala de mantenimiento y más tiempo trabajando a una distancia segura, con la seguridad de que sus monitores estarán preparados para alertarlos si los peligros relacionados con gases presentan un riesgo para la seguridad.

Cuando la amenaza de la COVID-19 finalmente termine y su sitio regrese a su capacidad operativa completa, iNet Exchange le da una flexibilidad total para escalar su programa de detección de gases. Ya sea que necesite agregar más monitores, cambiar los gases que supervisa o adaptar de alguna otra manera, iNet Exchange le permite cambiar rápida y fácilmente su programa para mantener seguros a sus trabajadores.